Piedra Angular (la Clave para retomar el camino)
Playa Las Catedrales. Galicia Marzo 2010 © amorenot
Todas las grandes edificaciones construidas por la humanidad, siempre han tenido una Piedra Angular o Clave (Piedra en forma de ángulo que en el vértice de una arco soporta la presión de ambos lados permitiendo que se sostenga el mismo), si no en el término exacto de la misma, si como parte fundamental.
No solo en las construcciones existe esta Clave o Piedra Angular, también las leyes matemáticas la tienen, pero lo más interesante también existe en el equilibrio de las relaciones de las sociedades y las personas.
Todas la sociedades conocidas, en especial las conformadas por los animales más desarrolladas hasta llegar a nuestra sociedad humana, fundamentan su interrelación en alguna forma de comunicación, desde las primitivas hasta las más complejas, que no necesariamente las más desarrolladas como nosotros lo humanos.
Con toda seguridad las sociedades o comunidades con formas de comunicación primitivas no se han permitido un mayor desarrollo y al contrario en algunos casos han involucionado hasta inclusive llegar a desaparecer.
Las comunicaciones en algunas especies animales es sorprendente, aunque en algunos casos pudieran tildarse de sencillas no lo son, más sí el respeto por su significado y aquí me voy a permitir explicar mi consideración: existen sociedades con comunicaciones complejas pero con normas que las rigen sencillas, pero que son altamente respetadas, en esas sociedades sus individuos conviven, se auxilian mutuamente, si existe alguna jerarquía se respeta, hay división del trabajo, hay equilibrio en la satisfacción de las necesidades básicas y más superiores, en suma son sociedades ordenadas, en fin son sociedades felices, igual una sociedad ejemplarizante como la de las abejas u otros insectos, los delfínidos, etc., sociedades Ancestrales o de Estados modernos avanzados o con grandes pretensiones de serlo.
Es así como me voy acercando a la Clave o Piedra Angular de estas líneas, cuando como hoy en esta Amada Venezuela, percibimos la degeneración de nuestras formas de comunicación, cuando no cumplimos las más pequeñas normas que la rigen, estamos destruyendo en vez de construir la Clave de la relación de nuestra sociedad, que es la comunicación, cuando prevalece y se esgrime que la comunicación entre una Bomba Lacrimógena y una Bomba Molotov es la que vale, cuando se esgrime que cualquier otro tipo de comunicación formal entre pares y no se diga con la otra parte de la sociedad es una traición y no se puede llevar a cabo, cuando se niegan esas vías, esa Arcada en equilibrio estará en terrible peligro de derrumbarse. No aceptar que la otra parte tiene un contrapeso, una cualidad importante de la sociedad, es pensar realizar una arcada sobre un solo pilar, podremos iniciar a construirla pero esa sociedad así establecida por el sencillo principio de la física y de las leyes de convivencia se desmoronará.
En este punto también voy a decir que una arcada, en este caso nuestra sociedad, sin presiones de ambos lados también se caerá, esa también es ley de física y de convivencia, deberá haber presión desde ambos extremos y al final ambos extremos, ambas columnas deberán resistir, ser suficientemente rígidas, fuertes, formadas, estables para también mantener el equilibrio, para mantenernos como sociedad con pretensiones de estado moderno, no con esto quiero decir que los pilares actuales de nuestra sociedad están bien formados o no se puedan reconstruir, pero sí, que es necesario al menos dos partes.
La única otra forma que veo en nuestro caso ante esta degeneración de la comunicación, es construir una pared y entonces ninguna de las partes podrá pasara a través de ella, verse, cerraremos definitivamente el paso, construiremos una barricada infranqueable en ambos sentidos, no permitiremos inclusive que la voces de ambos lados se oigan, que las pancartas o afiches se lean, nos negaremos mutuamente.
Prefiero una sociedad en la que aunque imperfecta intentemos colocar una piedra angular, e intentemos fortalecer para beneficio mutuo, los pilares de ambos lados en la que estamos sustentados. Un País al fin con muchos puentes tendidos, con caminos donde podamos ir a un lado y a otro y como esas sociedades básicas y a la vez avanzadas de las hormigas, que constantemente se comunican, se auxilian y al llegar el invierno (porque lo hay para todos) tengamos donde guarecernos, donde logremos una Venezuela con el mayor grado de felicidad posible y de todos.
