domingo, 25 de mayo de 2014

Seguir a la Batuta (...y hacer buen pan)

     
        Seguir a la Batuta (...y hacer buen pan)



                       Caña en flor. Aragua.                                                                                                        Dic 2017 © amorenot 

La Batuta de los directores de orquesta tienen un grandísimo encanto, aunque no sepamos de que se trata la seguimos, pareciera que nos hipnotiza, el director de orquestas no hace el sonido, lo acompasa, pero cada uno de los integrantes de la orquesta son los que individualmente hacen que sus instrumentos cambien el silencio por hermosas vibraciones, cada uno de esos integrantes de la orquesta de una forma muy sutil sigue a la batuta y se acompasa con ella, cada violinista, cada oboe, cada timbal o flauta, dan lo mejor de sí, ponen su alma porque su instrumento vibre, suene al nivel que lo indica la partitura, ninguno va a sobresalir si no es su momento, nadie va a callar si no es su momento, todo es un soñar de vibraciones que nos deleita, que nos transporta, que nos emociona, que nos puede hacer llorar o sentir que nuestro corazón galopa, todo es un bello sistema.

Así como en la música, podemos encontrar bellísimos, interesantes e increíbles sistemas, los bosques,  los cañaverales en flor, los arrecifes, las manadas de ciervos o de leones, los cardumen, siempre habrá una batuta, un acompasar de las olas, un ir y venir del viento y la lluvia, un líder, un guía de manada, pero todos equilibrados, la naturaleza es sabia y las sociedades de personas organizadas también, como orquestas y así surgen todas esas actividades que nos hipnotizan que nos emocionan y en las que quisiéramos ser partícipes.

Cuando pasamos cerca de una panadería nos alegra el corazón el aroma del pan y allí esta alguien que está intentado tocar de la mejor forma su instrumento, de acompasarse con la masa, de dejarla leudar, de no romper ni agitar los tiempos, de hacer  del horno un instrumento, del que salgan las notas dulces del aroma que nos hipnotiza, ese músico de migas esta acompasado, sigue una batuta, sigue un reloj, sigue la receta de su maestro como el músico su partitura, está intentado dar sus mejores notas.

En muchas oportunidades como individuos de una sociedad, esperamos que el batuta toque nuestro violín o agite la baqueta contar el bombo, nos paramos a querer oír la música sin participar en ella, sin ni siquiera tomar nuestro instrumento, pensamos que la batuta lo es todo, que los demás podrán dar las notas que nosotros estamos obligados a dar y más aun, muchísimas veces tenemos el descaro de criticar al oboe o a la viola y hasta decir que esta desafinada, decir que el batuta no lo hace con energía, que no logra sacarle provecho a la orquesta... y nosotros, estamos poniendo todo nuestros pulmones para hacer vibrar las notas que nos corresponden? tenemos la constancia, el tesón, la coherencia, el riesgo, el empeño  que tienen nuestros compañeros de orquesta para tratar de emocionar al público, estamos amasando el pan?. 

Y por nuestra causa, por nuestras faltas, por nuestra comodidad, por solo ver a la Batuta, porque no tocamos nuestro instrumento... nuestro sistema, nuestra comunidad, nuestra sociedad no suena como queremos, como aspiramos, como soñamos, pero que tanto criticamos y en algunos casos de la que nos queremos ir.

En cada rincón de nuestra sociedad hay un hacedor de música, en cada rincón de cada oficio hay un integrante de una gran orquesta, esta orquesta que nos toca vivir como sociedad, como país, como parte de una organización, de un gremio, de una familia, de una pareja.
  
Será que hoy podemos tomar nuestro instrumento y “Seguir a la Batuta” de forma sutil?, para poner todos nuestro corazón en las notas de nuestra partitura, hacer que broten las notas dulces del aroma de la miga, hacer buen pan... y hacer familia y hacer comunidad y hacer sociedad y hacer País y estar orgulloso de nuestros sueños.

Alberto Moreno.
25 de Mayo de 2014




domingo, 18 de mayo de 2014

Las Murallas no son eternas

    
    Las murallas no son eternas. 
     (mañana serán las losas de nuestros caminos, encontremos las entradas)

    Ruinas imperio Romano. Tarragona España.                                                                                                   Septiembre 2013  © amorenot 

  La historia y la geografía está llena de murallas y restos imperiales derruidos, de los que solo quedan algunas señales, fortificaciones vacías, grandes muros hoy cubiertos por la naturaleza, palacios que no existen, solo sus bases debajo de nuevas y florecientes ciudades, murallas hoy convertidas en atracciones turísticas y en caminos y mejor aún atravesadas por caminos, por aquellos caminos que otrora ellas impedían.

  Si revisamos la historia de grandes hombres, lideres, científico y luchadores, también nos encontramos que han dejado atrás grandes murallas científicas, espaciales, paradigmas, océanos y muy importante han dejado atrás murallas y fortalezas mentales, emocionales imaginarias, murallas y fortalezas políticas, sociales, todas estas grandes limitaciones que no tienen estructura física, en muchos momento han sido agobiantes para los individuos, para las sociedades, porque contra una muralla física se lucha con armas, con máquinas, se buscan caminos que la rodeen, la horaden la tumben, frente a las murallas mentales nos encontramos inmovilizados por creer que no existes esos caminos, esas herramientas que en este caso diluyan el bloqueo, que encontremos las puertas para franquearlas y mejor aún, convertir estas supuestas limitaciones mentales en parte de nuestras fortalezas propias.

 Pudiera decirse que la ciencia del comportamiento humano, de la psiquiatría de la psicología, de la sociología han desarrollado herramientas para trabajar estas murallas mentales, que tenemos en muchos casos como limitantes para nuestro propio desarrollo personal y en sociedad, pero fundamentalmente todos estos estudioso han encontrado que así como la mente es poderosamente compleja, también es poderosamente sencilla y capaz de enfrentarse a todos estos retos tanto físicos como mentales.

  La compleja capacidad mental que poseemos, hace que de una forma sencillas, siempre y cuando actuemos consecuentemente, es decir con constancia y coherencia, podemos lograr romper todas estas barreras. 

  Fundamentalmente el poder definir y establecer que es lo que queremos que exista detrás de esta muralla, óigase bien “Queremos”, nos imaginemos que deseamos de forma positiva, porque no deseamos franquear una muralla para ir a un peor lugar, debemos pensar siempre que a donde quiera que fuésemos será mejor. 

  Así que de esa imagen construida de lo que queremos, vamos a partir y aquí otra clave: hemos de andar algún camino, alguna vía para "Encontrar las entradas", no como muchos dicen "la Salida" la intención no es salir de donde estamos, la intención es entrar a un mejor lugar. Esa rutas vías, métodos como queramos llamarlas también están en planos, en cartas geográficas que nuestra compleja mente humana tiene diseñadas o las diseñara, así que ahora lo que hay es que buscar esos mapas... punto a punto fijaremos la meta, el norte y desde nuestra encrucijada tomar de forma consecuente y coherente cada una de las decisiones que nos guíen, qué camino seguir, muchos ahora podrán pensar y si erramos en la vía, pues bueno ya tendremos oportunidad de corregir, lo peor es que por compleja o imposible que nos parezca una muralla no tratemos de derruirla, de encontrar las entrada de convertir el otro lado de la misma en nuestros sueños hechos realidad, nosotros y el tiempo nos encargaremos de convertir las piedras de estas fortalezas y muros en las "losas de nuestros caminos", con las que las hemos atravesado.

 Siempre pensemos: Las Murallas no son eternas, que del otro lado están nuestros sueños, el país que queremos, la familia con que soñamos, el trabajo que deseamos, la pareja con quien queremos compartir la felicidad de vivir, así que desmontemos sus piedras y hagamos caminos, pero debemos de iniciar a derribarlas ahora… que es cierto que el trabajo es arduo pero será recompensado. 

Alberto Moreno
18 de Mayo 2014

viernes, 9 de mayo de 2014

Los caminos no son fáciles


Los caminos no son fáciles (…pero son caminos)

                     Pirineo Español                                                                           Dic. 2012 amorenot

Desde que soñamos con nuestras metas, con el querer ser y lo más importante con el deber ser, siempre están presentes las dificultades, enormes, pesadas, que se repiten, siempre que tenemos sueños pareciera que las mochilas se llenan de piedras y nos cuesta enorme empezar a andar, tratamos una y otra vez de cargarla al hombro y buscar la vía para encontrar esos sueños, más desfallecemos y allí se queda todo, los sueños se vuelven nubes ligeras que se los lleva el viento y lo justificamos: "bueno así como estoy... estoy bien, estoy seguro, para que quiero otra cosa" y por un tiempo nuestros sueños los colocamos debajo de la pesada mochila.

Pues ahora es tiempo de hacer otra cosa:

Seguir soñando y si despiertas recordar el sueño y darle forma, fijarlo, si es necesario escribirlo, así como hemos hecho con esos paisajes infantiles que dibujamos, los tenemos que recomponer, los debemos de completar, los haremos más creíbles y así cuando eso sueños ya no se nos esfumen como nubes pasajeras, vamos a estar listos para el próximo paso.

Vaciar las mochilas, si vaciar las mochilas de todas esas piedras que siempre nos han impedido emprender camino, alli vamos a encontrar que mucho de lo que hay en la mochila lo colocamos innecesariamente en ella, frustraciones, caídas, decepciones, dificultades de otros que nos las hacemos nuestras, creencias y limites religiosos, raciales y hasta de genero, etc. con las cuales amarramos nuestra posibilidad de emprender, seguro que muchas de esas piedras nosotros mismos las hemos hecho crecer, así que a liberar la cargo y solo dejar lo necesario para el viaje, que en el camino hemos de encontrar más recursos, mas herramientas. Con esto seguro podremos prepararnos a lo siguiente.

Hacer nuestro mapa, nuestra ruta, debemos pensar fijamente en nuestro sueño y desde donde estamos, fijarnos la vía que tomaremos, (aquí podremos preguntar a quien ya hubiese hecho el camino, sus experiencias, la ruta que tomo, que ayudara un monton), seguro que en muchos casos no será fácil, pero lo que sí es seguro es que la podremos hacer, un poco más rápido o algo más lento,  por caminos algunos llanos y descansados y por otros difíciles y empedrados, pero al final estará ese paisaje, ese sueño, esa meta, que sino tan ideal como la imaginamos, más real de lo que nunca supusimos y la satisfacción del andar el camino, de haber dejado los límites, los temores y las seguridades conformistas a un lado.

Ahora con todo listo... nos damos la partida, poner en un lado el confort, nuestros límites y creencias, tomar la energía de los sueños, la seguridad de nuestros mapas y  la obligación de ser más de lo que somos porque lo merecemos.

El camino no es fácil pero todos son caminos y hay que echar a andar, porque hemos de llegar pronto.


Alberto Moreno.
7 Mayo 2014





Ing. Alberto Moreno T.